Si hay una arteria que define el alma de Asunción, esa es la Calle Palma. No es solo un conjunto de cuadras en el mapa; es un testigo vivo de la historia paraguaya, un barómetro del ánimo nacional y, ahora mismo, el epicentro de una de las transformaciones urbanas más emocionantes del país. Hablar de Palma es hablar de la identidad asuncena en su forma más pura. Es el lugar donde se celebraron victorias, se lloraron derrotas, y donde generaciones de paraguayos aprendieron a "palmear", ese acto casi ritual de pasear sin prisa, viendo y dejándose ver. Durante años, muchos la miraron con nostalgia, recordándola como un fantasma de una época dorada. Pero déjame decirte algo: esa nostalgia se está quedando obsoleta. Palma está despertando, y lo está haciendo con una fuerza que combina el respeto por su pasado con una visión de futuro muy clara.
Si estás leyendo esto, es probable que tengas curiosidad. Quizás eres un viajero buscando el corazón auténtico de la ciudad, o tal vez, un inversor con el olfato afinado, buscando la próxima gran oportunidad. En ambos casos, has llegado al lugar correcto.
Vamos a desgranar por qué la Calle Palma, en pleno 2025, es el tema del que todos deberían estar hablando.
El Resurgir de un Icono: Calle Palma como Eje de Asunción
Entender Palma es entender su geografía. No es una calle aislada; es la columna vertebral del Centro Histórico de Asunción (CHA). Nace (o muere, según cómo lo mires) cerca del puerto, a pasos del majestuoso Palacio de López (el palacio de gobierno) y la icónica Manzana de la Rivera, y se extiende hacia el sur, cruzando las principales arterias cívicas de la capital.
¿Cómo te ubicas y llegas?
Llegar a Palma es, francamente, inevitable si visitas Asunción. Si te hospedas en cualquier hotel del centro, simplemente camina. La mayoría de las líneas de transporte público que ingresan a la capital desde ciudades aledañas (como Luque, Lambaré o Fernando de la Mora) tienen rutas que te dejarán a una o dos cuadras.
Pero más que llegar en un vehículo, a Palma se llega caminando. Su verdadero valor se descubre a pie. La mejor forma de abordarla es empezar desde la intersección con la calle Chile o Alberdi, donde se encuentra el Panteón Nacional de los Héroes. Desde ese punto, cualquier dirección que tomes por Palma te sumergirá en su atmósfera. Es el kilómetro cero de la vida social asuncena. Olvídate del GPS por un momento y simplemente sigue el flujo de la gente; ella te llevará.
¿Qué vas a encontrar? El pulso de la calle
Aquí es donde la cosa se pone interesante. Durante un tiempo, Palma sufrió el éxodo comercial hacia los nuevos ejes corporativos de la ciudad, como Villa Morra. El centro quedó relegado, visto como un lugar de oficinas y burocracia que se vaciaba a las 5 de la tarde.
Eso se acabó.
Hoy, Palma es un hervidero de actividad, especialmente gracias a iniciativas como "Palmear". Lo que comenzó como un evento esporádico de fin de semana, se ha consolidado como una cita obligada. Los sábados, la calle se vuelve peatonal en sus tramos principales. ¿El resultado? Una explosión de vida.
Food trucks, artesanos vendiendo filigrana y ñandutí, bares sacando mesas a la vereda, música en vivo, artistas callejeros y, lo más importante, familias enteras recuperando el espacio público.
El comercio tradicional sigue ahí: las tiendas de ropa, las zapaterías clásicas y las grandes librerías. Pero ahora conviven con una nueva generación: cafeterías de especialidad que tuestan su propio café, heladerías artesanales, pequeños restaurantes de autor y locales de comida internacional (como las arepas venezolanas que ya son un clásico). La calle ha recuperado su diversidad.
Las Joyas Culturales que la rodean
Palma no es solo comercio; es el pasillo que conecta los grandes hitos culturales del país. Al caminar por ella, estás literalmente a metros de historia pura:
- El Panteón Nacional de los Héroes y Oratorio de la Virgen de la Asunción: Es el corazón visual y espiritual. Este mausoleo, donde descansan los principales héroes de la historia paraguaya, es una joya arquitectónica. Su cúpula domina el paisaje del centro.
- La Manzana de la Rivera: Ubicada frente al Palacio de López, en el inicio de Palma. Este complejo agrupa nueve casas históricas restauradas, incluyendo la Casa Viola, que alberga el Museo Memoria de la Ciudad, y la biblioteca municipal. Es un oasis cultural con patios internos, exposiciones de arte y vistas al río.
- La Antigua Estación Central del Ferrocarril: Aunque técnicamente a unas cuadras, su revitalización es parte integral del plan maestro del CHA. Este edificio, uno de los más hermosos de la ciudad, es un símbolo del pasado próspero de Paraguay y está siendo restaurado para convertirse en un gran nodo cultural y turístico.
Caminar por Palma es tener estos lugares como paradas obligatorias, usando la calle como el hilo conductor de tu recorrido.
La Gran Apuesta: Inversión y Revitalización
Hablemos de lo que está pasando debajo del asfalto, porque es fundamental para entender la oportunidad. El mayor problema histórico de Palma y del CHA era su infraestructura obsoleta y, seamos honestos, su estética descuidada. Los cables aéreos (el "spaghetti" de cables negros) ahogaban la arquitectura.
El proyecto "Palma Brilla" y el plan de revitalización del CHA, que recibió una inyección masiva de más de 77 mil millones de guaraníes (más de 10 millones de dólares), están cambiando eso radicalmente.
¿Qué significa esto en la práctica?
- Cableado Subterráneo: ¡Adiós, cables aéreos! Por primera vez, se está despejando el cielo de Palma. Esto no es solo estético; es una mejora masiva en la seguridad y la fiabilidad de los servicios. Ahora se pueden apreciar las fachadas de los edificios históricos.
- Infraestructura Nueva: Se están renovando las veredas (haciéndolas inclusivas y uniformes), el sistema de drenaje pluvial (vital en Asunción) y la pavimentación.
- Iluminación LED: Toda la calle cuenta ahora con iluminación moderna, lo que la transforma por completo en la noche. Ha pasado de ser un lugar oscuro y percibido como inseguro, a ser un paseo vibrante y bien iluminado.
Esta inversión pública es la señal más fuerte que un inversor privado puede recibir.
El gobierno está "preparando la cancha", asumiendo el costo de la infraestructura base, lo que reduce drásticamente el riesgo para quien quiera abrir un negocio o desarrollar un proyecto inmobiliario.
La Veta Inmobiliaria: ¿Por qué invertir en Palma?
Si el eje corporativo (Villa Morra, Aviadores del Chaco) está saturado y los precios están por las nubes, el Centro Histórico es la frontera obvia de crecimiento. Pero no es un crecimiento desde cero; es un crecimiento basado en el valor patrimonial.
La oportunidad en Palma no está en construir torres de cristal de 40 pisos. La verdadera rentabilidad radica en la reconversión y el reciclaje de edificios históricos. Piensa en los barrios como Palermo en Buenos Aires o Casco Viejo en Panamá, pero en una etapa mucho más temprana.
Aquí, el metro cuadrado "comprado" es accesible, pero el metro cuadrado "terminado" (restaurado con buen gusto) tiene un potencial de apreciación enorme. Las oportunidades claras son:
- Boutique Hotels: El turista moderno busca experiencias auténticas. Un edificio antiguo sobre Palma, restaurado con diseño moderno pero respetando la fachada histórica, es el producto perfecto.
- Gastronomía: Los locales en planta baja son ideales para restaurantes, bares y cafés. La peatonalización de los fines de semana (Palmear) garantiza un flujo de clientes que el eje corporativo no tiene.
- Vivienda (Loft/Airbnb): El CHA se está repoblando. Hay una demanda creciente de jóvenes profesionales y extranjeros que quieren vivir en el centro, cerca de la cultura y con carácter. Convertir pisos superiores de edificios antiguos en apartamentos tipo loft para alquiler temporal o permanente es una jugada inteligente.
La ventaja de Palma es que la "historia" ya está construida. No tienes que inventar una narrativa; solo tienes que pulirla.
El Inversor Extranjero: ¿Qué debes tener en cuenta?
Paraguay es conocido por ser uno de los países más abiertos a la inversión extranjera en la región, y el sector inmobiliario no es la excepción. El marco legal es claro y los impuestos son, francamente, un regalo.
Si vienes de fuera, esto es lo que necesitas saber:
Primero, el régimen fiscal. Paraguay es famoso por su "triple 10": 10% de IVA (Impuesto al Valor Agregado), 10% de Impuesto a la Renta Personal (IRP) y 10% de Impuesto a la Renta Empresarial (IRE). Es uno de los esquemas más simples y bajos del continente.
Segundo, la compra de propiedades. Como extranjero, puedes comprar propiedades en Paraguay sin mayores restricciones (con la excepción de algunas zonas fronterizas específicas, que no aplican al centro de Asunción).
Tercero, la residencia. Si tu plan es invertir y gestionar, querrás una residencia. Aquí es donde entra el SUACE (Sistema Unificado de Apertura y Cierre de Empresas). Paraguay ofrece una Residencia Permanente para Inversionistas. Para calificar a través de este sistema y obtener tu "Constancia de Inversionista", generalmente se requiere demostrar una inversión mínima. Históricamente, esta cifra ha rondado los 70.000 dólares americanos (o su equivalente en guaraníes, unos 300 millones).
El papeleo es tu principal desafío. Necesitarás tus documentos básicos (pasaporte, certificado de nacimiento, estado civil, antecedentes penales de tu país de origen y de Interpol). La regla de oro es: todo documento extranjero debe venir Apostillado (según el Convenio de La Haya) o, si tu país no es miembro, legalizado por el consulado paraguayo en tu país de origen. Además, todo debe ser traducido al español por un traductor público matriculado en Paraguay.
El proceso es directo, pero requiere paciencia y, preferiblemente, un buen gestor o escribano local que conozca los pasillos de Migraciones y del Ministerio de Industria y Comercio.
Observaciones Finales: El Momento es Ahora
He visto a Palma en sus días grises y la estoy viendo ahora en su renacimiento. La diferencia es palpable. Ya no es una promesa; es un hecho en construcción. La inversión pública ya se ejecutó en gran parte, los cables están desapareciendo y la gente está volviendo.
El inversor que llega hoy a Calle Palma no está comprando una ruina; está comprando en la planta baja de un proyecto de revitalización que ya tiene cimientos sólidos.
El riesgo, por supuesto, siempre existe. La burocracia puede ser lenta y la mentalidad de "dejar para mañana" es un vicio local. Sin embargo, el impulso político y ciudadano detrás de la recuperación del CHA es más fuerte que nunca.
La pregunta que debes hacerte no es si Palma recuperará su esplendor. La pregunta es: ¿vas a ser parte de esa historia de recuperación, o te vas a quedar mirando desde la vereda cómo otros toman la oportunidad?
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